Por: Yesid Francisco Perea Mosquera
Por
las situaciones de orden público que hemos debido padecer, se hizo necesario,
desde tiempo atrás, la realización de Consejos de Seguridad en diversas partes
del departamento; y se entiende esa especie de consejos itinerantes, en razón a
la proliferación de circunstancias, a cuál más generadora de desasosiego e
inseguridad. Todos en determinado momento dejamos de creer en esos consejos por
la ausencia de resultados concretos, al menos de esos esperados por la
sociedad, asqueada de actos contrarios a la convivencia normal y civilizada.
Bueno,
todo es dinámico, y del más reciente Consejo Extraordinario de Seguridad,
surgieron decisiones de suma importancia para la recuperación del orden y la
tranquilidad en el Chocó; se golpea y de qué manera, el estado de cosas que no
aportaba soluciones como resultado de estos consejos, mismos denominados como
“botadera de corriente” por parte de un importante alcalde del departamento,
cansado también de tantas reuniones sin resultados importantes.
Los anuncios hechos por las autoridades del
más alto nivel y por nuestra gobernadora del departamento, dan cuenta de
aportes concretos para la búsqueda de soluciones a las dificultades por las
cuales venimos atravesando; recordemos algunas: i)la creación de un pelotón
para ser ubicado en la vía que de Quibdó conduce al corregimiento de La Mansa
en el Carmen del Atrato; ii) aumento de 186 militares para engrosar a los
acantonados en la Brigada 15 con asiento en esta ciudad; iii) un millón de
dólares para ser utilizados en el desminado del Chocó; iv)17 embarcaciones para
ser distribuidas en los tres principales ríos del departamento, v) 4 unidades
especializadas antiexplosivos para evitar se repita lo acontecido en el
Municipio del Río Iró, donde unos explosivos estuvieron entre la población
porque no se contaba con el personal experimentado para desactivarlos, y vi)
seis motores fuera de borda aportados por la gobernación del Fondo de Seguridad
Territorial (Fonset..?), por citar algunos.
Creo
que los desvelos de la Gobernadora NUBIA CAROLINA tuvieron eco, porque sus
angustias han sido evidentes, como también sus voces reclamando por la
seguridad y el desarrollo de nuestra comarca; no se puede decir que no habla,
que no reclama pues, si hay algo para destacar es su claridad verbal y mental.
La protección de la inversión y del comercio
ha sido otro esfuerzo que debe ligarse a sus logros, porque en eso también ha
gastado muchos esfuerzos, los cuales comienzan a arrojar resultados.
No tengo datos puntuales referidos a los
avances logrados con las comunidades indígenas, pero estoy seguro que al
respecto cosas ha intentado, pero hablar con sordos no debe ser lo más
aconsejable ni será lo más grato (sordos que no quieren oír…), especialmente si
–como ha venido ocurriendo- los indígenas, con sus excepciones seguramente,
están colocando lo individual por encima de lo colectivo, y hoy están
agrediendo físicamente a la comunidad y asumiendo roles de las autoridades
legítimamente constituidas, como requisar vehículos particulares.
No
baje la guardia señora gobernadora, pues los resultados queridos por la
comunidad están dándose, gracias a su tenacidad.