Esta
medida se tomó luego de recibir más de 2.100 reclamaciones de usuarios
del Fomag en
menos de 20 días y ante la negativa de responder a 11 requerimientos
por parte de estas entidades de vigilancia.
Según
el comunicado, esta es una acción urgente para asegurar la protección y
garantizar el derecho a la salud de maestros, maestras y beneficiarios
del régimen de excepción del Magisterio.
La
entidad, en ejercicio de sus funciones de inspección, vigilancia y
control, ordenó esta tarde la atención inmediata de los 2.100 casos
reportados y otros adicionales que pudieran surgir.
Esta
medida se fundamenta en la normativa vigente que permite intervenir
cuando la vida de las personas está en riesgo, como ocurre con los usuarios
del régimen especial del Magisterio.
“El
objetivo principal de este tipo de medida es la eliminación de
cualquier tipo de barrera que esté afectando en este momento la adecuada
atención de los pacientes, garantizando continuidad y calidad en la
prestación de servicios de salud”, afirmó el superintendente Nacional
de Salud, Luis Carlos Leal Angarita.
Para
asegurar la efectividad de la medida, la Supersalud otorgó un plazo máximo
de 72 horas para que la Fiduprevisora y el Fomag cumplan con esta orden.
Además,
estas entidades deberán presentar un informe detallado a la Supersalud
en un plazo no mayor a cinco días hábiles tras la notificación de la
medida.
Este
informe deberá incluir el trámite y los resultados efectivos de la
prestación de servicios a los usuarios afectados.
Este
llamado lo hace la superintendencia luego de evidenciar una negativa de
responder a 11 requerimientos por parte de la entidad.